Foto:Contagio Radio
17 Nov 2017
Coincidiendo con la fecha en que fue asesinado José Jair Cortes, vocal de la Junta de Gobierno del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera, la Agencia de la ONU para los refugiados ACNUR denunció este viernes que existe un patrón de asesinatos y amenazas contra los defensores de los derechos humanos y los líderes comunitarios en la región de la costa del Pacífico de Colombia, pertenecientes en su mayoría a comunidades indígenas y afrocolombianas.
La ACNUR en correspondencia con los datos que maneja la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, registra que 78 líderes y miembros de organizaciones sociales este año, y al menos 13 casos de presunto asesinato, una situación que la agencia asegura desde cualquier perspectiva es alarmante.
Adicionalmente, la denuncia pone de manifiesto el desplazamiento que se viene presentando en el país, asegurando que “1.500 personas han sido desplazadas en 2017 y muchas más han estado viviendo en confinamiento, lo que significa que no pueden acceder a sus cultivos o ir a pescar para satisfacer sus necesidades básicas de subsistencia”.
Particularmente se menciona que entre el 7 y el 12 de noviembre, más de 46 familias fueron desplazadas por la fuerza en Barbacoas y Tumaco en Nariño y que “los líderes de estas áreas creen que la cantidad real de víctimas podría ser mucho mayor, ya que las personas temen denunciar los abusos”.
Rocío Castañeda, oficial de publicación del ACNUR asegura que todas esas situaciones les han llevado a “prender un poco las alarmas, hacer un llamado a que se fortalezcan todos los mecanismos de protección, tanto para los líderes como para las comunidades” teniendo en cuenta que es un punto central para la implementación de los acuerdos de paz.
“Estas comunidades deben sentir que los acuerdos de paz efectivamente significan protección, significa su posibilidad de permanecer en el territorio, de que todos los programas que vienen junto con la implementación de los acuerdos se den de manera expedita porque también las necesidades de las comunidades son urgentes”
A pesar de la reiterada posición del gobierno frente a la sistematicidad de los homicidios Castañeda afirma que “podemos ver en el seguimiento que hacemos que hay factores comunes en estas muertes” refiriéndose a que los asesinatos de líderes sociales que han ocurrido desde la muerte de José Jair Cortes en el mes de octubre, se han presentado en la zona del pacífico colombiano particularmente.
Desde la organización hacen un llamado al gobierno para que se implementen todas la políticas de protección, “la ACNUR estuvo apoyando a la UNP en la creación de un modelo de protección colectiva que incluye muchas medidas y que también necesita del acuerdo de las comunidades” y aseguran que este tipo de modelo debe reforzarse.