[Foto: Equipo Jurídico Pueblos]
[01 Sept 2017]
Las comunidades de San Vicente y el Carmen del Chucurí en Santander sentaron su voz de protesta ante los riesgos del proyecto de fracking APE Marteja, adelantado por Ecopetrol y la empresa canadiense Parex Resources. Ellos y ellas buscarán proteger los derechos colectivos a un ambiente sano y la protección del territorio.
Mauricio Gómez, líder social e integrante de la Asociación Campesina de la Serranía de los Yareguies (ASOCAMPESEYA) afirmó que “estas empresas quieren hacer perforaciones a grandes profundidades de más de 20 mil pies utilizando 3 litros de agua por segundo que sirven para abastecer a 10 familias por mes”.
Este proyecto de fracking se suma a las actividades pasadas de extracción de hidrocarburos que han perjudicado a las comunidades. Han dicho que estas empresas pretenden contaminar ríos y quebradas “con el argumento de que son solo nacederos de agua”. (Le puede interesar: "Campesinos de Simacota se oponen a destrucción que ocasionaría empresa Parex")
Gómez indicó que en 2006, uno de los proyectos de Ecopetrol ocasionó la destrucción de gran parte de la vereda Payoa a 22 kilometros del municipio Sabana de Torres, “cuando fue cerrado el pozo la acumulación de gas que quedó bajo la tierra ocasionó una gran explosión y derrumbó aproximadamente 20 viviendas”.
Cabe recordar que la empresa Parex Resources ya hace presencia en el municipio de Simacota también en Santander. Allí las comunidades han denunciado una constante contaminación de los afluentes hídricos, no tienen acueducto y la empresa ha creado líneas eléctricas para realizar actividad petrolera. (Le puede interesar: "La polémica detrás del proyecto de Ecopetrol en Guamal, Meta")
En la audiencia que se realizó hoy está citada la empresa Ecopetrol y los habitantes de los municipios afectados esperan que la discusión sirva para que no se dé la licencia ambiental “para frenar el grave daño que le quieren hacer a las comunidades”.