[Foto: @cejil]
[18 Jul 2018]
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó medidas cautelares en favor del Pueblo Siona de Colombia, que habita en las riveras del Río Putumayo, acción que se da en respuesta a la situación de exterminio físico y cultural a la que se enfrenta esta comunidad indígena, por la acción de diferentes grupos armados en su territorio.
Francisco Quintana, director del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) para la Región Andina, Norte America y el Caribe, afirma que a pesar del Acuerdo de Paz, en la zona que habitan los Siona aún no se vive la paz, y por el contrario, como ocurre en otros lugares de Colombia, "se mantiene un alto nivel de riesgo".
La medida cautelar fue ordenada gracias a la constatación hecha por la CIDH, de que los miembros del pueblo Siona, viven una situación de urgencia debido a que sufren limitaciones para desplazarse en su territorio por parte de actores armados, la presencia de minas antipersona y el reclutamiento forzado que padecen los jóvenes de la comunidad.
Estos factores, además de poner en riesgo la vida e integridad de los nativos, también afectarían las formas de autogobierno de la organización indígena, así como la vida comunitaria. Por estas razones, los habitantes de los resguardos Buenavista y Santa Cruz de Puñuñu Blanco, esperan que se tomen acciones que detengan la violencia, particularmente en esos territorios.
De igual forma, las medidas cautelares obligan al Estado colombiano para que se destinen los recursos humanos, financieros y técnicos suficientes e idóneos, para proveer las medidas integrales de reparación y restitución de derechos territoriales, que garanticen su compromiso con la vida e integridad del Pueblo Siona. (Le puede interesar: "66% de los pueblos indígenas está a punto de desaparecer: ONIC")