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[23 Nov 2016]
Pobladores de la Zona Humanitaria de Nueva Vida denunciaron que un grupo aproximado de 120 paramilitares se encuentra asentado en el canal Zapata, sobre el río Cirilo, lugar que se encuentra a una hora en bote de la Zona Humanitaria, y pese a que entes gubernamentales y estatales conocen la situación que pone en riesgo la vida de los pobladores, no se ha tomado ninguna medida que los proteja.
Hasta el momento, la única acción por parte de las Instituciones fue el envió de unidades militares que ingresaron a la Zona Humanitaria y que desde hace un mes, violando el espacio humanitario, han estado irrumpiendo en el lugar con el pretexto de “que se deben comunicar y comprar víveres” y que luego de haber estado en el lugar tomaron un camino contrario al lugar en donde se encuentran los paramilitares. Le puede interesar:"Mujeres de Cacarica: 20 años espantando la guerra"
No obstante los paramilitares que se autodenominan como “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” continúan amedrentando a los habitantes de la Zona Humanitaria, pese a que estos les hayan exigido que se retirarán de su territorio. El pasado 20 de noviembre pobladores informaron que paramilitares detuvieron a un muchacho al que amenazaron de muerte y le robaron todas sus pertenencias.
Además, se conoció que los militares grabaron su ingreso a la Zona Humanitaria de Nueva Vida y lo están mostrando en sus recorridos a los pobladores de Cacarica que se encuentran en el camino, señalando que los habitantes de la Zona Humanitaria “son los que joden y los tienen en la mira”Le puede interesar:"120 paramilitares se toman comunidad en la cuenca del Río Cacarica"
Las zonas humanitarias son lugares que proponen una aplicación concreta del derecho Internacional de los derechos humanos y del derecho humanitario que garantice los derechos de la población civil a una vida digna y un ambiente sano, por lo tanto ningún actor del conflicto armado, como militares, guerrillas o paramilitares pueden hacer presencia en este lugar. Principal razón por la que se pone en riesgo la vida de las comunidades, frente las acciones tanto de militares como de paramilitares.