Foto: [colombiadrogas.wordpress.com]

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[Isabelino Valencia, Consejo Comunitario de la Cuenca del Río Naya]

[28 de Julio 2015]

El pasado sábado las comunidades que habitan en la cuenca del Río Naya, nuevamente fueron víctimas de las fumigaciones con glifosato, lo que sus habitantes señalan como un atropello a la vida, al regar con veneno los ríos y los cultivos de pan coger.

Según cuenta Isabelino Valencia, fundador y miembro de Consejo Comunitario de la Cuenca del Río Naya, desde el 2008 se ha planteado al gobierno una propuesta de sustitución de cultivos de uso ilícito por proyectos alternativos, fue por eso, que los pobladores del Naya decidieron sembrar 40 parcelas de cacao, sin embargo, “la fumigación arrasó con todo”, expresa el líder comunitario.

Pese a que desde el gobierno se había dado la orden de parar las fumigaciones aéreas, actualmente se está realizando aspersiones aéreas de una manera “indiscriminada, inconsulta y desprevenida donde ya casi no hay coca", dice Isabelino, quien agrega que los habitantes piensan que puede tratase más bien de una estrategia del mismo gobierno para desplazar a las comunidades y despojarlos de sus tierras.

Esta fumigación afectó todo el territorio, es decir los 20600 pobladores que habitan en la cuenca del río, que alimenta a todas las comunidades de esa zona del país.

Desde la población se pide un pronunciamiento de la comunidad internacional para que se detengan las aspersiones aéreas. “No nos oponemos a la erradicación necesitamos que se haga de una manera concertada, con una propuesta  de vida”, señala Valencia.