Foto:HispanTV
9 Nov 2016
Con más del 72% de la votación, el Frente Sandinista de Liberación Nacional, se impuso en las urnas para lo que será el cuarto mandato de Daniel Ortega, tercero consecutivo, como presidente de Nicaragua, alcanzando además la mayoría de las curules en la Asamblea Nacional del pais centroamericano.
Con el 99,8 % de las mesas electorales escrutadas, los resultados indican que el 68% de los ciudadanos ejerció su derecho constitucional al voto, apoyando en su mayoría la propuesta de Ortega, quien para esta oportunidad se presentó junto a su esposa Rosario Murillo, como fórmula vicepresidencial.
Un total de 1.803.944 votos le otorgaron la victoria al comandante Sandinista contra los 373.230 alcanzados por su principal contendor Máximo Rodríguez, candidato del Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y ex guerrillero de la “Contra” que enfrentó al sandinismo durante los años 80.
Los comicios, estuvieron acompañados por seis expresidentes latinoamericanos: Fernando Lugo de Paraguay, Manuel Zelaya de Honduras (2006-2009), el salvadoreño Mauricio Funes (2009-2014), Vinicio Cerezo (1986-1991) y Álvaro Colom (2008-2012) de Guatemala.
Las políticas sociales y económicas de Ortega.
Analistas internacionales aseguran que la nueva reelección de Ortega, es el resultado del proceso de reconstrucción socioeconómica y modernización del pais iniciado desde su segundo mandato en 2007, que sirvió para posicionar a Nicaragua en el segundo lugar de crecimiento económico en la región por detrás de Panamá.
Los impactos de la economía social de mercado, han permitido el establecimiento de políticas que ayuden a reducir los niveles de pobreza y fomenten la generación de empleo, estrategias para las cuales se han establecido alianzas con la empresa privada, lo que ha facilitado una mayor inversión en obras públicas de infraestructura y fortalecimiento de los programas de atención social en salud, educación, emprendimiento y acceso a la comunicación, donde la figura de la primera dama, ahora vicepresidenta, ha cobrado mayor relevancia.
Oposición no reconoce el triunfo.
Los opositores al gobierno Ortega, aglutinados en el Frente Amplio por la Democracia (FAD), aseguran que la abstención en todo el pais estuvo sobre el 70%, con lo que a su parecer resta cualquier tipo de legitimidad al proceso electoral, sumado al hecho de no contar con observadores electorales nacionales o internacionales de la Organización de Estados Americanos (OEA) ni la Unión Europea (UE), que acompañaran el proceso.
La oposición quedó fuera de la contienda a causa de un fallo judicial que los despojó de la representación legal de su partido cuatro meses antes de las elecciones, en una maniobra que atribuyeron los afectados a Ortega. Algunos de los militantes, anunciaron que no aceptarán los resultados electorales y exigieron convocar nuevas elecciones, decisión que requeriría la aprobación de dos tercios del Congreso.