Foto:24-horas.mx
Entrevista con [Jonas Pentzien], miembro de Blockupy:
La inauguración de la nueva sede del BCE en Frankfurt, Alemania, ha sumido a la ciudad en protesta[s] en contra de la institución, de la Troika, de las políticas neoliberales y en contra del propio capitalismo.
La nueva sede ha costado 1.200 millones de euros, en comparación con los 2.000 millones que el BCE exige a Grecia como recorte en presupuesto social para paliar la pobreza extrema causada por las propias políticas impuestas por el BCE.
En el marco de las protestas convocadas por el Blockupy, plataforma que agrupa cientos de organizaciones sociales en contra del capitalismo y de la crisis europea, ha convocado a 8.000 personas, esta jornada ha estado acompañada de acciones de desobediencia civil pacífica como la de los manifestantes que se han colgado del edificio del BCE con una pancarta que ponía “El capitalismo mata”.
También se han realizado acciones violentas en la mañana de este miércoles, que finalizaron con el ataque a una comisaría de policía y más de 10 coches policiales ardiendo.
El presidente de la institución financiera, Mario Draghi, que califica el edificio de "lo mejor que Europa puede lograr junta", ha tenido que entrar en helicóptero, igual que otros presidentes de bancos invitados, debido a los bloqueos de calles por parte de los manifestantes.
En horas de la tarde unos 22.000 participantes acudieron a la convocatoria, donde se han realizado cientos de acciones de sabotaje contra bancos y contra símbolos del capitalismo. La marcha ha transcurrido en un ambiente de unidad con la participación de todo tipo de organizaciones sociales.
Según Jonas Pentzien, miembro de la plataforma Blockupy y de la red de organizaciones sociales en contra de la crisis en la UE, la represión no se ha hecho esperar, ya que hay más de 500 detenidos y más de 130 heridos. En total cerca de un 5% de los manifestantes de la mañana han sido detenidos.
Para el activista este ha sido un paso importante para el rechazo de las políticas neoliberales y en solidaridad con los países que las están padeciendo como Grecia, también destaca la fuerte represión y vaticina una nueva oleada de protestas en toda Europa contra el BCE.