Foto: Bernardino Dura
[11 Jul 2016]
El gobierno nacional no ha atendido la situación en la que viven 476 indígenas Embera Wounaan del resguardo Pichimá en Chocó, que por cuenta de los continuos bombardeos del Ejército terminaron en condición de desplazamiento.
De acuerdo con Bernardino Dura, líder indígena, se trata de 94 familias que llevan casi tres meses viviendo en albergues del casco urbano del municipio y que son insuficientes, para atender la proliferación de epidemias originadas por el consumo de agua contaminada.
Es por eso que la comunidad demanda de las autoridades municipales, departamentales y nacionales, acciones concretas que permitan mejorar sus actuales condiciones en términos de seguridad, salud y educación, debido a que aseguran sentirse acorralados por la fuerza pública, además señalan que el hacinamiento en el único albergue es preocupante sobre todo por la gran cantidad de niños que hay.
“La Secretaria de Salud debe darnos soluciones, pero las instituciones estatales nos han abandonado, además necesitamos que cesen los bombardeos para regresar a nuestro territorio", denuncia el líder indígena, quien agrega que algunos pobladores junto con autoridades municipales, regresaron a los resguardos para verificar la situación y evidenciaron que los bombardeos aún continúan.