Foto: [www.pulzo.com]
[Sara Valencia, presidenta del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera, Tumaco]
En el municipio de Tumaco, Nariño, se vive un desastre ambiental por cuenta del atentado perpetrado por la guerrilla contra un oleoducto de Ecopetrol. Pese a que algunos medios han informado que las autoridades y la empresa atienden la tragedia, lo cierto es que “el plan de contingencia de Ecopetrol no ha servido y nadie ha mostrado una acción concreta de ayuda a la comunidad” dice Sara Valencia, presidenta del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera, en Tumaco.
“Estamos en incertidumbre y no se encuentra una solución puntual por parte del gobierno" dice Valencia, quien resalta que aunque el petróleo ha contaminado las fuentes hídricas que proveen a la población, “las fumigaciones indiscriminadas con glifosato también están dañado las aguas”.
Aunque por diversos medios de comunicación masiva, se ha anunciado la llegada de carrotanques para abastecer de agua a la población, según la habitante de Alto Mira y Frontera, estos no han llegado y no se ha atendido la situación humanitaria que viven las comunidades, razón por la que dicen sentir discriminados y desconocidos por parte de las autoridades.
La mancha de crudo ha recorrido aproximadamente 15 kilómetros, y ha contaminado cerca de 5 fuentes de agua. El petróleo ya llegó a la bocatoma que da paso al mar, lo que genera graves consecuencias a la flora y fauna de la zona, pues ya se ha registrado muerte de peces y aves que habitan ese ecosistema.
Los habitantes de Tumaco, dicen no entender con quién es la guerra, cuando los que sufren las consecuencias de esta son las comunidades, que se quedan sin agua y sin luz.