[Foto: Contagio Radio]

[9 Abr 2016]

Mi padre fue un “luchador por cambiar la democracia representativa por la democracia directa”, relata Gloria Gaitán, hija de Jorge Eliecer Gaitán, caudillo liberal, y referente político, asesinado el 9 de Abril de 1948. Gloria relata que en su casa había que levantarse a las 6 de la mañana, “llueva o truene”, hacer gimnasia y comer alimentos integrales para cuidar la salud. Además estaba prohíbo mentir.

Jorge Eliecer entraba a la plaza de toros y todo el público se paraba a aplaudir y la banda tocaba el himno nacional en su versión porro, “la versión de los gaitanistas (…) cuando terminaba la corrida sacaban en hombros al torero y a mi papá”, relata Gloria que creció entre las “salas de la resistencia” y la plaza pública al lado de Jorge y de Amparo “Ella, la noche anterior soñó que lo mataban” por eso lo invitó a encuadernar la constitución y tomarse el poder, conversa, antes rememorar cómo vivió ella el 9 de Abril.

Jorge, esposo de Amparo, hijo de la profesora Manuela Ayala y del librero liberal Eliécer Gaitán Otálora, de familia intelectual “por suerte”, pero “inmensamente pobres”, como dice su hija, sigue vivo en la memoria de las víctimas del Estado que hoy conmemoran  el dolor de cientos y miles de muertes, pero también celebran los cientos y miles de vidas entregadas por pensar y trabajar por una Colombia distinta.

Gloria Gaitán afirma que la memoria de su papá es muy revolucionaria, pero la memoria verdadera, no la del caudilló y el ícoino, no la memoria de las estatuas que son "sarcófagos ideológicos" sino sus ideas y sus construcciones legales e ideológicas. Esa es la memoria que se debe retratar, afirma.

Cuando asesinaron a Jorge Eliecer Gaitán “cada uno sintió que lo habían herido a sí mismo”, ahora 68 años después la herida sigue abierta y la memoria sigue viva.

Primera Parte de entrevista especial con Gloria Gaitán

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Segunda Parte

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