Mujeres reclaman derechos de la comunidad y del ambiente del Río Sogamoso

Foto: Vanguardia.com
[Claudia Patricia Ortíz, Movimiento Prodefensa del río Sogamoso]

Las mujeres del sector La Playa, municipio de Betulia, Santander, en compañía del Movimiento en defensa del Río Sogamoso y del Movimiento Ríos Vivos de Colombia, realizaron una marcha hacia Bucaramanga, en defensa de la comunidad y el ambiente que se han visto afectados por la represa Hidrosogamoso, construida por la empresa ISAGEN.

Se trata de la Quinta Jornada en Defensa de los Territorios y la Vida, donde las mujeres exigen a la gobernación de Santander y a ISAGEN, la reparación integral a las familias que piden la reubicación, debido a que no quieren “seguir oliendo gas metano y ácido sulfhídrico”, producidos por la contaminación en el río por construcción de la represa.

Además resaltan que las mujeres, los niños y niñas, son quienes más se han visto afectados por la contaminación del río Sogamoso, pues ahora es “un río donde los niños ya no se pueden bañar por que se enferman, mucho menos pueden tomar de esa agua”, afirma Claudia Patricia Ortiz, representante del Movimiento Prodefensa del río Sogamoso y del Movimiento Ríos Vivos de Colombia.

Ortíz, asegura que están reclamando la garantía de los derechos colectivos, “ya que hay total complicidad del gobierno, mas cuando el 57.6% de ISAGEN pertenece a los colombianos”, dice la representante del Movimiento Ríos Vivos, quien agrega que la comunidad está en desacuerdo con la venta de  la empresa.

“Nosotros no estamos de acuerdo en que ISAGEN y el gobierno local y departamental construyan  vías, viviendas y acueductos, esa no es la reparación que queremos, porque eso solo genera que aumenten los impuestos y los servicios públicos,  en  cambio no hay trabajo, ni un ambiente sano para que las familias se desarrollen”.

La comunidad instauró una acción popular en 2014 con el fin de reclamar los daños causados al medio ambiente y los derechos de reparación colectiva, pues denuncian que las autoridades intentan ocultar las consecuencias sobre la pesca y los cultivos, con el fenómeno del cambio climático.