Foto: elpais
[3 Jun 2015]
Cerca de una veintena de organizaciones que hacen parte de la campaña “saquen mi cuerpo de la guerra”, repudiaron la decisión de las autoridades judiciales de otorgar la libertad de Alejandro Cárdenas Orozco, alias “JJ”, quien es uno de los implicados en los crímenes cometidos contra la periodista Jineth Bedoya Lima, ocurridos el 25 de Mayo del año 2000.
Según las organizaciones “este hecho es una prueba fehaciente de la existencia de un ambiente de impunidad permanente en Colombia y la ausencia de una política de tolerancia cero en materia de violencia contra las mujeres por parte del Estado Colombiano”. Agregan que durante estos 15 años han sido testigos de la falta de voluntad de investigar y sancionar a los responsables de estos hechos.
Por su parte, la Fundación para la Libertad de Prensa –FLIP, afirmó que este es un retroceso en la búsqueda de la justicia y “un mensaje de permisividad y no castigo frente a las agresiones contra la prensa”.
Jineth Bedoya fue secuestrada por paramilitares en la cárcel “La Modelo” de Bogotá el 25 de mayo del año 2000, fue torturada física, psicológicamente y también abusada sexualmente por sus captores. Tras 15 años de ocurridos los hechos no hay condenas y el crimen sigue en la impunidad.
Recientemente Bedoya fue parte de una de las delegaciones de víctimas escuchadas por las FARC y el gobierno nacional en una de las sesiones de visita de las víctimas a la mesa de conversaciones, sin embargo, a pesar de los anuncios de compromiso con ellos y ellas por parte del gobierno nacional, hoy no hay hechos concretos y reales de esos compromisos.
Bedoya también manifestó su rechazo a la decisión de preclusión de la investigación contra alias “JJ” y afirmó en su cuenta de Twitter que "Mientras apoyaba Ley de Feminicidio, @FiscaliaCol ordenó libertad de uno de mis violadores. Tengo el corazón golpeado y la dignidad intacta", en referencia a la recientemente aprobada ley “Rosa Elvira Cely”.