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El plan del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien había fijado el 1° de julio como fecha en la que iniciaría la anexión de colonias judías en Cisjordania; aunado al plan presentado a inicios de año por Donald Trump para Oriente Medio, ha situado nuevamente el foco de atención de la Comunidad Internacional en el conflicto que se vive entre Palestina e Israel. (Lea también: Comienza la Semana Contra el Apartheid Israelí en América Latina)
Este conflicto según el analista internacional Víctor de Currealugo, se remonta a finales del siglo XIX, pasando por la decisión de Naciones Unidas de partir el territorio palestino en 1947, la anexión de Jerusalén, Cisjordania y Gaza en 1967; el establecimiento de la denominada Línea Verde y la barrera israelí en Cisjordania; y que de nuevo toma vigencia con la decisión de Israel de apropiarse del valle del Rio Jordán.
La resistencia palestina desde el territorio
Juani Rishmawi, de nacionalidad palestina e integrante de la ONG Health Work Committess, relató desde Belén la cruda realidad que se vive en Palestina y la crisis humanitaria que se enfrenta en dicho territorio.
Según Rishmawi la crisis humanitaria actual pasa por tres frentes principales. El primero, la ocupación israelí que ha generado la expulsión y el desplazamiento del pueblo palestino de su propio territorio, con la destrucción de varios asentamientos en la zona C en Cisjordania.
Por otra lado, la inoperatividad de la Autoridad Palestina, la cual, no tiene un brazo institucional lo suficientemente fuerte para proteger las garantías de sus nacionales frente a la violencia ejercida por parte del gobierno y las fuerzas israelíes.
En tercer lugar, la crisis derivada por la pandemia, agravada porque por una parte, con el congelamiento de la economía que se experimenta en varias regiones, al menos 50.000 trabajadores y trabajadoras se han visto obligados a migrar a la parte israelí para obtener ingresos y a su vuelta al territorio palestino, han traído el virus generando un rebrote de Covid-19; y por otra parte, existen regiones como Hebrón donde la Autoridad Palestina no puede brindar tratamiento médico a las personas porque el gobierno israelí lo prohíbe, agravando así la ya difícil situación de salubridad.
Para Rishmawi la moral palestina se encuentra menguada por todas estas problemáticas, aunque enfatiza en que el palestino «es un pueblo que nunca se rinde».
Nuestro pueblo ha sido expulsado de su propia tierra»
Juani Rishmawi, palestina integrande la ONG Health Work Committess
Rishmawi también se refirió a los palestinos que se encuentran fuera del territorio por diversas circunstancias y particularmente a la situación de sus hijos, quienes se encuentran fuera de Palestina por temor a la persecución de las fuerzas israelíes.
Al pueblo palestino fuera del territorio no se le puede exigir que vengan a pelear porque tienen hijos [que cuidar]. Yo asumí lo que me pueda pasar, pero no puedo hacerlo con mis hijos que pueden tener una oportunidad […] para una vida mejor»
Juani Rishmawi, palestina integrande la ONG Health Work Committess
La defensa por la liberación fuera del territorio
Alí Nofal, quien hace parte de los cerca de 120.000 palestinos que residen en Colombia y está nacionalizado en nuestro país, se refirió a las luchas que lideran los palestinos, que como él, se encuentran fuera del territorio, en defensa de la liberación de su pueblo.
Señaló que si bien se trabaja mucho para apoyar la causa desde el extranjero, cualquier esfuerzo es poco, comparado con el de las personas que defienden la liberación palestina desde el territorio quienes se ven obligados a «regar su propia sangre» en defensa de su pueblo.
Alí, quien estuvo preso en la cárcel de Nablus, se refirió al maltrato y tortura al que son sometidos los prisioneros, quienes son apresados por el simple hecho de ser palestinos a manos del Ejército y el Mossad israelíes, quienes los someten a crueles torturas para que acepten la comisión de conductas en las que nunca incurrieron.
También afirmó que «son más de 7.000 palestinos prisioneros en cárceles como las de Nablus, Ramala» entre otras y que las violaciones a Derechos Humanos que se producen a diario afectan incluso a niños y niñas quienes también son encerrados en las cárceles. (Le puede interesar: 56 niños palestinos fueron asesinados en 2018 por el ejército Israelí)
Añadió que los medios masivos de comunicación en Colombia atienden a una agenda sionista y que el Gobierno encabezado por Duque acepta la anexión de Israel porque es afín con ese Estado, haciéndole un llamado al Presidente para que desde su política exterior apoye y se solidarice con la causa palestina.
Es un acto repudiable y condenable la política del gobierno colombiano frente a la cuestión palestina»
Alí Nofal, colombo-palestino residente en Colombia